Mi vocación

Siempre he querido ser esa muchachita de piel de ébano que se adelanta del coro en la misa dominical y canta con pasión "Lord is gonna tell you something".




De niña fantaseaba con ser una intrépida granjera que recorre sus tierras a caballo y se enfrenta con los forajidos que intentan robar sus reses.




Pero lo que de verdad me gustaría es ser la cantante del piano-bar, la que susurra desgarradas canciones de amor y vuelve locos a los hombres cuando se tumba sobre el piano.




En fin, cosas normales: conducir una Harley, liderar una guerrilla, hacer abdicar a un rey, instaurar una república, ganar un Nobel, un Pulitzer...


Pero pensé que un Oscar me era más factible y decidí ser actriz. Siempre puedes ponerte en la piel de otras personas y, si te cansas, te apeas...

Aunque yo me meto tanto en los papeles...Ahora estoy preparando el próximo, es una mujer un tanto pirada que lo deja todo para irse a vivir a un remoto pueblo...Ya vereís, éste lo bordo seguro!!!