Noche de ronda...

Hace una noche estupenda, el cielo estrellado a más no poder...


La calma, la paz, el silencio, a veces exasperante en este pueblo, se agradecen de nuevo. Más que nada, porque vengo de oír a un necio que no se cansa de su propia voz y sabe de todo. De todo, sí. No sé qué coño hace aquí pudiendo ser catedrático de "Todología" en Boston...

Bebiendo sidra, escuchando a Johnny Cash, fumando flores de Primavera y recordando la conversación de esta tarde con una amiga. "Hay gente que nunca se moja en ningún tema y luego se arriman al lado que más les interesa."

Yo soy bocazas profesional, no es nada nuevo. He metido la pata en innumerables ocasiones por hablar de más, por meterme donde nadie me llama, por interesarme más de la cuenta, por preguntar... Y no logro verme de otra manera, ni sé vivir sin involucrarme.

Yo no quiero enterarme de lo que pasa en mi vida por los telediarios, no quiero que me lo cuenten quienes, previamente han decidido qué parte contarme. Y digo mi vida, sí, porque, aunque hay gente que se empeña en creer que no va con ellos, lo de la crisis, la corrupción y la desolación de muchos ciudadanos de este país, forma parte de mi vida.

Pensar en ello da miedo, pena y angustia, estoy de acuerdo, pero que piensen otros por tí, para que no te atormentes mientras sigues consumiendo, es lo peor que te puede pasar. Si tus abuelos, bisabuelos, tatarabuelos, etc... hubieran pensado lo mismo, no tendrías Facebook, digo, no serías libre, digo, no votarías, digo... Coño!!! Va a ser que lo dejaron todo a medio hacer...

Seamos justos, ellos hicieron mucho porque tenían poco que perder. Pero nosotros no hacemos nada porque tememos perder las cosas que nos vendieron y que, en realidad, no necesitamos.

Y siempre, cuando pienso, cuando me encabrono, cuando pierdo la fe, cuando me vuelvo egoísta, cuando miro a los ojos de los míos, recuerdo estas palabras:

Cuando los nazis vinieron a llevarse a los comunistas,
guardé silencio, porque yo no era comunista,

Cuando encarcelaron a los socialdemócratas,
guardé silencio, porque yo no era socialdemócrata,

Cuando vinieron a buscar a los sindicalistas,
no protesté, porque yo no era sindicalista,

Cuando vinieron a llevarse a los judíos,
no protesté, porque yo no era judío,

Cuando vinieron a buscarme,
no había nadie más que pudiera protestar.

 

Martin Niemöller

PD- Y una frase que he oído a varias personas que respeto: "Para ganar hay que perder primero."