QUE FUE DE BABY JANE?

Y QUE HABRÁ SIDO DE TODOS LOS QUE LA MIRABAN SIN VERLA?

martes, diciembre 14, 2010

La mediocridad lo ocupa todo...

¿Cómo puede acabar un fantástico día de descanso con un post de tan deprimente título?

Fácil: Viendo un par de telediarios...

Que yo no los veo nunca, y menos en mi día sacrosanto, pero en el chigre donde apuraba mis últimos momentos de albedrío, y ante la incapacidad de entretenerme de mis vecinos, me he tragao dos...

Alguien tendrá que estudiar la posibilidad de incluir el visionado de telediarios como atenuante en casos de enajenación mental. Porque a mi me han puesto de una mala ostia que no es normal...

Y ya no es la crisis, o la corrupción, o Berlusconi, es la sensación de que cada noticia es igual de nefasta que la anterior. Todas distintas pero de similar origen. Porque ¿cómo coño pueden sonar igual todos los actores de la comedia?

Lo mismo da escuchar a un ministro hablando de controladores aéreos, que a una alcadesa hablando de urbanismo, que a la oposición hablando de crisis, que al Papa hablando de paz, que a Paca la Culona inaugurando un pantano (he tenido un flashback). Suenan todos exactamente igual o, mejor dicho, no suenan. Ya se han convertido en un absurdo ruido de fondo que nadie escucha.

No tienen nada que decir pero pagan para que les escriban vacíos discursos iguales entre ellos y, por lo que se ve, al mismo publicista.

No sé, a lo mejor el texto es cojonudo y lo joden ellos, bien entrenados para actuar pero que no se creen su papel ( como si Rafaela Aparicio recitara "to be or not to be")

Hoy me ha parecido que no merecen siquiera unas palabras y, sin embargo, ya van unas cuantas... Porque: son anodinos, malos actores, incompetentes y, sobre todo, mediocres.

Porque no parecen haber tenido infancia, ni haber soñado nunca, ni tener emociones, ni sangre.

Y yo me emociono todos los días, sigo viva porque sueño, porque amo, porque quiero y porque mi mundo no se parece en nada al que me quieren contar. Y eso, mi universo de principitos repúblicanos y princesas feministas, no me lo puede quitar una pandilla de mediocres.

Sin embargo, una ardilla sí que puede arruinarme el día...Afortunadamente frené a tiempo.


PD- Para los que os respigasteis con la frase de la ardilla y os resbaló todo lo demás, mi enhorabuena. Mi próximo día libre salgo con vosotros.

PD2- Uno de los nuestros me dijo hoy: "Yo también soy fans del Ferreiro".