Como el tiempo...

Ahora llueve, ahora para...

Ahora río, ahora lloro, ahoro digo: "Coño, voy a escribir algo en el blog!!!" Y ahora me da pereza...Porque ¿cómo explicar lo mío?

Tengo borrasca por la costa y calor en el interior.

Me como el mundo por las mañanas y a la noche se me indigesta.

Hoy me he sentido mal por cobrarle el desayuno a un hombre que vagaba buscando trabajo. ¿No tengo corazón? Creo que sí, pero soy autónoma...De todos modos, le he recomendado encarecidamente que fuera a sablear al alcalde. Tengo corazón y mala baba..Y el hombre era muy pesao, hay testigos.

Ayer me dijeron que un amigo se está muriendo. Me tomé una sidra a su mala salud y me cagué en todo. Tengo mucho corazón pero aún más mala ostia...

Mi padre pretende que llame a mi tía porque su marido está operado de la próstata. Mi tía aún no conoce a mi hija. Mi hija tiene seis años y medio. Papá, tengo corazón y tarifa plana pero no soy gilipollas.

Y sigo juntando manías, me estaré haciendo mayor. Ver un capítulo de Colombo cada noche (más bien los primeros quince minutos...), levantar un dedito cada vez que me cruzo con la benemérita, llamar necio a mi perro unas veinte veces al día, reñir con la tele y gritarle "Ya voy!!!" al teléfono...Va a ser que sí, suena todo muy senil.

Además, me empeño en quitarle las legañas a mi niña mientras esperamos el transporte y hasta limpiarle las comisuras del Colacao con saliva. Díos mío, debe de odiarme!!! Por qué repetimos compulsivamente esas cosas que de niños detestábamos de nuestros padres???

Pues eso, como el tiempo, repunantuca y plomiza.

Xomezana Riba

Parecían estar gritando: "Eh, que estamos aquí!!!"

Me senté a charlar con ellas. Prubitinas, la jubilación les pilló por sorpresa. Tenían tantas ganas de seguir caleyando...

Una ya había estado punto de que la jubilaran antes y estaba más resignada, pero le pusieron una chapina y todavía aguantó un tiempín.

Hablaban sin parar, pisándose una a la otra.

Les dije: "Teneís que aprender a disfrutar del descanso."

Y yo tengo que dejar los porros...

Tuerto cabrón!!!

Estoy muy cansada.

Caerse una y otra vez y volver a levantarse es agotador.

Sonreír cuando se tienen ganas de llorar es extenuante.

Tener fé para volver a perderla cada día es muy cansino.

Probablemente, lo que me mantiene en pie ahora mismo es la mala ostia.

Así que el tuerto que me miró debería de estar pasando mucho miedo.

Me voy a hacer un llavero con tu ojo bueno!!!