Se nos va el Padrino...
Ayer fue un Domingo de lo más agradable, divertido y, en el fondo, triste.
Esperamos lo normal (entre 20 y 30 minutos) a que Mary Weather llegara a buscarnos, siempre tarde y siempre con una fantástica sonrisa que te hace olvidar el retraso.
Paramos a comprar el pan y a que nos sablearan cuatro euros por una botella de vino peleón. Al fin, llegamos a casa del Padrino y fuimos recibidos con algarabía por los cánidos allí presentes, no tanto por los humanos...El Padrino hacía rato que esperaba y ya se había bajado media botella de vino con La Maravillas.
Hablamos (rajamos), comimos, reímos, fumamos y nos repartimos los restos del naufragio (esto último no tan radical pero casi...) Después de la fumata, cafés y chupitos, se desvarió un poquito y empezó a notarse un tufillo de tristeza-melancolía que se colaba por las rendijas.
Mary Weather quiso hacer karaoke y cantarle al Padrino áquello de: "Algo se muere en el alma cuando un amigo se va..." Pero entre la pena y el globo, esto es lo único que logró:

Se nos va...y me siento como una perra egoísta porque no quiero que se vaya y, en el fondo, estoy deseando que vuelva dentro de un mes y me diga: "Me equivoqué". Está muy mal desear algo así a un amigo pero no lo puedo evitar.
NO TE VAYAS!!!!
Prometo devoleverte el disco firmado de "Paul Cowboy" y no volveremos a quitarte el sofá a la hora de la siesta (ni yo, ni Mary Weather, ni el Potter, ni Horryman) Te ves tan mono cuando duermes:

Bueno, vale, ya me he puesto más plasta de lo normal. Te quiero y espero que todo te vaya de fábula pero te voy a echar de menos horrores. De todos modos, como la doctora me va recetar Orphidales por un tubo, soy capaz de coger un avión en cuanto vuelva de las Inglaterras.
Un beso.
Esperamos lo normal (entre 20 y 30 minutos) a que Mary Weather llegara a buscarnos, siempre tarde y siempre con una fantástica sonrisa que te hace olvidar el retraso.
Paramos a comprar el pan y a que nos sablearan cuatro euros por una botella de vino peleón. Al fin, llegamos a casa del Padrino y fuimos recibidos con algarabía por los cánidos allí presentes, no tanto por los humanos...El Padrino hacía rato que esperaba y ya se había bajado media botella de vino con La Maravillas.
Hablamos (rajamos), comimos, reímos, fumamos y nos repartimos los restos del naufragio (esto último no tan radical pero casi...) Después de la fumata, cafés y chupitos, se desvarió un poquito y empezó a notarse un tufillo de tristeza-melancolía que se colaba por las rendijas.
Mary Weather quiso hacer karaoke y cantarle al Padrino áquello de: "Algo se muere en el alma cuando un amigo se va..." Pero entre la pena y el globo, esto es lo único que logró:

Se nos va...y me siento como una perra egoísta porque no quiero que se vaya y, en el fondo, estoy deseando que vuelva dentro de un mes y me diga: "Me equivoqué". Está muy mal desear algo así a un amigo pero no lo puedo evitar.
NO TE VAYAS!!!!
Prometo devoleverte el disco firmado de "Paul Cowboy" y no volveremos a quitarte el sofá a la hora de la siesta (ni yo, ni Mary Weather, ni el Potter, ni Horryman) Te ves tan mono cuando duermes:

Bueno, vale, ya me he puesto más plasta de lo normal. Te quiero y espero que todo te vaya de fábula pero te voy a echar de menos horrores. De todos modos, como la doctora me va recetar Orphidales por un tubo, soy capaz de coger un avión en cuanto vuelva de las Inglaterras.
Un beso.